El 1 de enero de 1985, debido a la baja rentabilidad económica, se cerró definitivamente la línea internacional ferroviaria que comunica España y Portugal a su paso por Salamanca. Un siglo antes concretamente el 9 de diciembre de 1887 tuvo lugar una solemne ceremonia con la asistencia de la reina Victoria Eugenia a su inauguración.
En la actualidad, debido al paso del tiempo, sólo se conservan los restos de las estaciones, túneles y puentes de lo que fue esta línea. Y es precisamente en este estado de ruina como nos encontramos las estaciones de Lumbrares y La Fregeneda en España y la de Barca D’Alba en Portugal.
En la actualidad, debido al paso del tiempo, sólo se conservan los restos de las estaciones, túneles y puentes de lo que fue esta línea. Y es precisamente en este estado de ruina como nos encontramos las estaciones de Lumbrares y La Fregeneda en España y la de Barca D’Alba en Portugal.